Francia expresa preocupación por las acciones militares de EE. UU. en el Caribe
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Pascal Confavreux, señaló que Francia sigue “con atención y con cierta preocupación la sucesión de bombardeos estadounidenses y las muertes derivadas de estas acciones"

Caracas / Foto: WSJ- El Gobierno francés manifestó este jueves preocupación ante la serie de operaciones militares llevadas a cabo por Estados Unidos en el Caribe, dirigidas contra embarcaciones señaladas por presunto tráfico de drogas.
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Pascal Confavreux, señaló que Francia sigue “con atención y con cierta preocupación la sucesión de bombardeos estadounidenses y las muertes derivadas de estas acciones".
Confavreux subrayó que existe una preocupación compartida con Estados Unidos y las naciones caribeñas sobre la amenaza que representa el narcotráfico y enfatizó la “plena determinación” de Francia para movilizar todos los medios necesarios para cortar los flujos de drogas y desalentar a los traficantes.
Sin embargo, Francia reafirmó su estrategia de cooperación con los países de la región para combatir el narcotráfico.
En agosto, París anunció un paquete de medidas para reforzar la seguridad en Guadalupe —territorio francés en las Antillas— tras el incremento de la violencia y de actividades delictivas vinculadas al tráfico de drogas. Entre las acciones destacan la incorporación de más investigadores al laboratorio balístico OFAST, la creación de escuadrones móviles de gendarmería, nuevas brigadas náuticas, radares estratégicos y un dron para vigilar los 700 kilómetros de costa del archipiélago.
El ministro del Interior, Bruno Retailleau, afirmó entonces que Francia enviaba “un mensaje claro a los traficantes: se enfrentarán a un Estado que nunca cede frente a la violencia”, insistiendo en que el Gobierno está decidido a proteger a sus ciudadanos en todo su territorio.
Tensiones en el Caribe
El pronunciamiento de la canciller colombiana se produce en medio tensiones entre Estados Unidos y Venezuela por la mayor movilización militar estadounidense en el Caribe y el Pacífico en décadas, que incluye destructores, aviones de combate, buques de guerra y el portaaviones USS Gerald R. Ford.
La Casa Blanca reconoce haber bombardeado una veintena de presuntas “narcolanchas”, acciones que han dejado casi 80 muertos. Aunque Washington sostiene que se trataba de narcotraficantes, Human Rights Watch, expertos de la ONU y gobiernos del Caribe y Suramérica han advertido sobre posibles “ejecuciones extrajudiciales” y calificado los ataques como “ilegales”.
El presidente venezolano Nicolás Maduro ha denunciado en varias oportunidades que Estados Unidos estaría encubriendo un plan de “cambio de régimen” mediante una supuesta ofensiva antidrogas y ordenó la movilización de tropas en todo el país.
Por su parte, Gustavo Petro ha intensificado sus críticas hacia el presidente estadounidense, Donald Trump, acusándolo de cometer “asesinatos” y “crímenes de guerra” durante su ofensiva antidrogas.